Las piscinas, aunque asociadas con el ocio y la recreación, tienen un impacto ambiental significativo a nivel mundial.
Su contribución a la contaminación del medio ambiente se debe a varios factores clave, como el alto consumo de agua, el uso intensivo de productos químicos, el gasto energético y la generación de residuos plásticos.

Fuente: aqmlaboratorios.com
El gestor de energías renovables y preservación del medio ambiente, Jorge Segundo Zegarra Reategui, en denuncia a distintos factores que afectan el medio ambiente, opinó que el agua es un recurso natural que viene siendo altamente afectado. Y es que el consumo excesivo del agua es uno de los principales problemas ambientales a nivel mundial.
¿Qué impacto ambiental tienen las piscinas?
Es posible que ninguno se haya puesto a pensar en dónde termina el agua que se emplean en las piscinas. Una piscina promedio puede contener entre 30,000 y 100,000 litros de agua, y muchas requieren constantes recargas debido a la evaporación, filtraciones y mantenimiento. En regiones con escasez de agua, el llenado y la reposición de piscinas contribuyen al agotamiento de fuentes hídricas ya de por sí limitadas.
Asimismo, para mantener el agua limpia y libre de bacterias, las piscinas dependen de productos químicos como el cloro, los alguicidas y los reguladores del agua. Lamentablemente, estas sustancias pueden filtrarse al suelo y a fuentes de agua cercanas, afectando los ecosistemas acuáticos y la biodiversidad.
Otro factor es el alto consumo energético es el funcionamiento de una piscina implica un uso considerable de electricidad para bombas de filtrado, sistemas de climatización e iluminación. En muchas zonas, la electricidad proviene de fuentes fósiles, lo que incrementa la huella de carbono de estas instalaciones.
El mantenimiento de piscinas genera grandes cantidades de desechos plásticos, como envases de productos químicos, flotadores, juguetes acuáticos y cubiertas plásticas. Muchos de estos materiales no son reciclados adecuadamente y terminan en vertederos o en cuerpos de agua, contribuyendo a la contaminación por plásticos.
Jorge Segundo Zegarra Reategui: ¿Qué prácticas podemos adoptar para reducir su impacto?
De acuerdo a lo recomendado por Jorge Zegarra Reategui, para reducir el impacto ambiental de las piscinas, existen diversas soluciones sostenibles como el uso de sistemas de filtrado más eficientes, la implementación de cubiertas para minimizar la evaporación del agua y el aprovechamiento de fuentes de energía renovables para su mantenimiento.
Aunque las piscinas proporcionan entretenimiento y bienestar, su impacto ambiental es innegable. Es fundamental adoptar prácticas más sostenibles y fomentar la conciencia sobre el consumo responsable de recursos para minimizar su huella ecológica.
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