El cambio climático tiene dos grandes frentes: la mitigación y la adaptación. Ante este contexto, se plantea la economía circular como un puente entre ambos frentes para entrelazarlos y abordar el problema de manera integral.
En este panorama, la mitigación busca reducir las emisiones de gases contaminantes o efecto invernadero (causa). Mientras que, la adaptación, fortalece nuestra resiliencia ante eventos climáticos extremos (efecto).
Si bien, estos dos frentes suelen verse como conceptos separados y/o dicotomía, la economía circular nos permite encontrar su punto de convergencia para llevar a cabo soluciones integrales a favor del medio ambiente.
Encontrar este punto de entrelazo entre ambos, permite generar soluciones que reduzcan emisiones y preparen a los recursos naturales y productivos ante una realidad de un mundo cambiante.

Jorge Zegarra Reategui: ¿Cómo logramos adaptarnos ante un mundo cambiante frente al cambio climático?
Pues, la economía circular es la clave. Esta permite reducir nuestras emisiones de gases de efecto invernadero; como también, reducir el impacto y cantidad de nuestros desperdicios. Pero, aún más importante, nos permite adaptarnos al cambio con soluciones regenerativas.
Ejemplos concretos en sectores claves:
Es importante que se empleen diseños de negocio basados en la eficiencia energética y proyectos que puedan reducir la huella de carbono. Este nuevo concepto permite que planteemos soluciones para garantizar estabilidad económica ante un contexto de cambio climático que puede perjudicar directamente nuestros recursos.
Dentro de los sectores claves encontramos a los siguientes:
- Construcción: Se puede hacer uso de materiales circulares que capturan dióxido de carbono (CO₂) y diseños adaptables a eventos climáticos extremos.
- Textil: Se puede implementar métodos regenerativos en el cultivo de fibras naturales y modelos de reutilización que reducen emisiones de gases de efecto invernadero.
- Alimentos: Gestionar una agricultura regenerativa que captura carbono y mejora la resiliencia del suelo ante cambios de clima extremos como sequías e inundaciones.
Este panorama permite replantearnos las estructuras tradicionales en donde los sectores relevantes de la sociedad no tenían como principal rival el cambio climático. Hoy, esta situación ha variado y; definitivamente, los impactos son devastadores en muchas localidades.
Por tal motivo, expertos en el tema de la preservación ambiental, como Jorge Zegarra Reategui, demuestran que aún estamos a tiempo de replantear nuestros procesos para lograr soluciones integrales que permitan asegurar los recursos actuales en un contexto de incertidumbre climática.
El principal objetivo de estas transiciones es cuidar del medio ambiente, reducir la huella de carbono en los procesos de producción y planificar contingencias ante eventos climáticos. Con ello, podemos plantear soluciones a mediano plazo como los ya mencionados. Como también, la captura de carbono, restauración de suelos, protección de la biodiversidad y demás.
Para más información sobre el cambio climático y Jorge Zegarra Reategui en los siguientes enlaces: